¡Argentina, y siga la joda!

En épocas mundialistas renace el patriotismo “y ¡vamos Argentina todavía!”, porque… cuando termina el mundial de fútbol se vuelven anarquistas y piqueteros. ¿Por qué no inventan una campaña publicitaria que aliente a Argentina desde adentro en vez de mostrar solamente como el país hincha por la selección de fútbol? Lo que quiero decir es que el famoso “¡vamos Argentina!” utilizado para el mundial puede ser bien utilizado para decirlo frente a un colono que labra su chacra, frente a una industria nacional, a la producción y al crecimiento del país, frente a un gobierno que termina con la desocupación, que genera puestos de trabajo, que termina con el trabajo infantil, un “¡vamos Argentina!” por una educación digna para todos. En ese caso, cuando vea que el país crece, que “la casa está en orden”, pero realmente en orden ¡Vamos Argentina todavía! Y déjense de hinchar tan solo por veintidós personas corriendo detrás de una pelota, que si las cosas estuvieran bien se les podría dar una pelota a cada uno.

No me entra en la cabeza cómo, hablando de actualidad, el gobierno tiene fondos para enviar ayuda a los pobres de Haití, en vez de terminar con la pobreza en nuestro país... para lo cual los fondos nunca alcanzan... (¿?)

Si siguen como hasta ahora, en vez de alentar al crecimiento de esta patria querida dirán “Argentina, y siga la joda” (como los de Bersuit Vergarabat), o como dijo Ricardo Darín en la película argentina Nueve Reinas: “Este país se va a la mierda”.

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